DOSCIENTOS AÑOS

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Te dio a luz hace doscientos años,
la propuesta joven, revolucionaria,
y te vistieron con trajes diferentes,
valles, ríos, montañas, cataratas.
 
A pesar del tiempo transcurrido,
aun te estamos pariendo, tierra gaucha.
 
Demasiada mujer para ser niña,
eres tan joven y tan madura, Patria,
doscientos años perece mucho tiempo,
pero a futuro sabemos que no es nada.
 
Tiene tu cuerpo cicatriz mestiza,
lamentos indios, y una letra blanca,
dicen que es oro que trajo el europeo,
en pago de otro robado a tus entrañas.
 
Tiene tu cuerpo la marca de la reja,
del inmigrante que sembró esperanza,
van por tus venas corriendo dos caudales,
sangre europea y sangre originaria.
 
Amas todos tus hijos, buena madre,
pero algunos de ellos no te aman,
y te duele un pasado y un presente,
que en egoísmos fraticidas te desangran.
 
Tal vez es tiempo de nacer de nuevo,
desde estos hijos, que un crisol de razas
forjó en el alba del tercer milenio,
y se proyectan a un mejor mañana.
 
Crear caminos que transiten todos,
desde una dignidad igualitaria,
hoy somos muchos ofreciendo el hombro,
gritando al mundo que te amamos, Patria.